Los seres humanos adquirimos los conocimientos de diferentes formas, y estos se clasifican en función de esa procedencia y según cuál es su objetivo o cómo vayamos a usar ese conocimiento, este puede ser: CIENTÍFICO (se basa en el análisis, observación y experimentación); EMPÍRICO (las vivencias propias); FILOSÓFICO (documentación y razonamiento ordenado); INTUITIVO (se involucra la razón y la consciencia); LÓGICO (entendimiento de las ideas con coherencia).
En esta categoría, hemos clasificado para ello todo lo que tenga que ver con los datos, el análisis, la formación, el aprendizaje, los libros, experiencias, competencias, metodologías y la observación.
Toda persona tiene dos educaciones, una que recibe de los demás y otra, más importante, que se da a sí mismo.
La conversación enriquece la comprensión, pero la soledad es la escuela del genio.
Edward Gibbon
En otras palabras, el cambio de «predecir y controlar» a «medir y reaccionar» no es solo tecnológico, aunque se necesita tecnología, sino psicológico.
Se ha demostrado que las personas cometen errores como el de preferir las manzanas las naranjas, las naranjas a las peras y las peras y las manzanas, en función de cómo se le formulen las preguntas relevantes. La secuencia es importante.
La estrategia para los descubridores y emprendedores es confiar menos en la planificación de arriba hacia abajo y centrarse en el máximo retoque y reconocer las oportunidades cuando se presenten. Así que no estoy de acuerdo con los seguidores de Marx y los de Adam Smith: la razón por la que los mercados libres funcionan es porque permiten que la gente tenga suerte, gracias a la prueba y el error agresivos, no dando recompensas o «incentivos» por la habilidad. La estrategia es, entonces, jugar tanto como sea posible e intentar recolectar tantas oportunidades de Black Swan como sea posible
Piensan que la inteligencia consiste en darse cuenta de que las cosas son relevantes (detectar patrones); en un mundo complejo, la inteligencia consiste en ignorar cosas que son irrelevantes (evitando patrones falsos)
Desde Aristóteles, los filósofos nos han enseñado que somos animales muy reflexivos, y que sabemos aprender mediante el razonamiento. Se tardó un tanto en descubrir que efectivamente pensamos, pero que nos va mejor el narrar hacia atrás para hacernos la ilusión de que comprendemos y dar cobertura a nuestras acciones pasadas. En el momento en que olvidamos esta realidad, llegó la “Ilustración” para metérnosla en la cabeza por segunda vez.
Olvídese de tirar los dados o las cajas de bombones como metáforas de la vida. Piense en usted mismo como un robot soñador en piloto automático y estará mucho más cerca de la verdad.
La comprensión es el factor liberador, es lo que nos libera y permite que se produzca la transformación. En esto consiste la práctica de cuidar de la ira.
THICH NHAT HANH: del libro DOMAR AL TIGRE INTERIOR
Lo intelectual, lo moral, lo religioso me parecen todos naturalmente unidos y entrelazados en un todo grande y armonioso.