La falta de conocimiento entorno a los efectos secundarios de la transformación digital de las TIC en las personas, ha conllevado un uso descontrolado e inconsciente de los dispositivos y herramientas digitales. La hecatombe provocada por la Covid-19 nos ha vuelto aún más dependientes de las comunicaciones a distancia y del consumo de contenidos en línea, ya sea para fines personales o profesionales. Este hecho ha provocado que nuestra dieta digital haya cambiado sustancialmente, y se haya convertido un tema urgente a tratar para poder volver a tener el control sobre nuestro tiempo, nuestro trabajo y nuestra vida.
Enséñame lo limitado de mi tiempo, porque el bien de la vida no radica en su extensión sino en su uso.
Séneca (4 a. C. – 65)
Para empezar a entender qué es la dieta digital y cómo nos está afectando, hay que tener en cuenta que, desde hace muchos años, estamos expuestos a:
- Un gran volumen de información (no siempre veraz, ni necesaria), hecho que provoca lo que se llama infoxicación o sobrecarga informativa.
- El uso continuo de aplicaciones diseñadas para mantener nuestra atención el máximo de tiempo posible y «engancharnos» (redes sociales, juegos, email, mensajería instantánea). Existe una adicción generalizada a los dispositivos móviles y un uso desmesurado e inconsciente de estos, así como una dependencia enfermiza a consultar constantemente las notificaciones de nuestro teléfono móvil.
Poco a poco, y sin darnos cuenta, hemos dejado que nuestros dispositivos sean los protagonistas de nuestra vida y se conviertan en el niño mimado de nuestro cerebro, al que le dejamos que nos interrumpa cuando quiera y le damos todo lo que nos pide.
El problema surge cuando este hecho cambia nuestros hábitos de vida y los hace menos saludables. Aparte de las consecuencias de la inactividad física para nuestro organismo, provocada por largas horas quiet@s delante de las pantallas (ordenador, móvil, TV, tableta…), el consumo de información digital y estar pendientes de notificaciones también conlleva otros efectos sobre nuestra mente, como la falta de atención o de concentración, pérdida de memoria y agotamiento mental al finalizar la jornada.
El teletrabajo y la formación a distancia han supuesto un aumento del uso de dispositivos digitales, así como del consumo de información digital y las reuniones virtuales. Por este motivo, debemos tomar consciencia y poner límites que nos permitan mejorar nuestro rendimiento, ser capaces de alertar a nuestro entorno (laboral y personal) en el uso inadecuado de la tecnología, y dedicar el tiempo adecuado para la consecución de las tareas.
«Es necesario saberse concentrar sobre una sola cosa. Todos los oficios deben ser ejercidos con concentración»
Yamamoto Tsunetomo.

Mejora tu productividad y optimiza el tiempo que pasas en entornos digitales.
Vivir con interrupciones constantes hace que nuestra concentración esté bajo mínimos, y con ella, nuestra productividad. ¿No os ha pasado el encontraros navegando por una web a la que no sabéis ni cómo habéis llegado, ni cuánto tiempo hace que habéis perdido el rumbo de vuestra tarea principal? Para los que nos dedicamos al mundo digital desde hace años, este problema no nos viene de nuevo y sabemos lo importante y difícil que es mantener una higiene digital óptima que nos facilite el día a día.
Es necesario adoptar un MINDSET digital equilibrado para adaptarse a esta nueva realidad en la que las tecnologías de la información y la comunicación, y las competencias comunicativas, son imprescindibles.
Lo primero que debemos hacer para empezar a poner orden digital a nuestra jornada es analizar nuestro uso actual de los dispositivos y sacar conclusiones. Es decir, responder a preguntas como:
- ¿Para qué utilizo cada dispositivo o aplicación?
- ¿Cuánto tiempo invierto en cada dispositivo y aplicación móvil?
- ¿Cuánto tiempo en dispositivos digitales lo dedico a trabajar y cuánto a tareas personales?
- ¿Qué situaciones digitales me distraen de mis objetivos diarios?
- ¿Qué actividades digitales no me aportan ningún beneficio o suponen una pérdida de tiempo excesiva?
- ¿Qué contenidos o aplicaciones me provocan más saturación mental al final del día?

Objetivos SMART: da el primer paso.
Una vez tengamos esta dieta digital actual, marcaremos unos objetivos SMART (específicos, medibles, alcanzables, relevantes y medibles en el tiempo), que nos permitirán saber si hemos logrado cumplir nuestro reto. Por ejemplo:
- Reducir en 20 minutos diarios el uso de redes sociales.
- Reducir en un 50% el volumen de consultas a las notificaciones del móvil.
- Reducir en un 30% el tiempo invertido en responder correos.
- Limitar a 45 minutos todas las reuniones virtuales.
Cuando tengamos nuestros objetivos marcados, tocará responder a la pregunta clave: ¿CÓMO ALCANZAREMOS NUESTRO OBJETIVO? La respuesta depende de cada persona, pero, en general podríamos decir que es un híbrido entre fuerza de voluntad, conocimientos y herramientas que nos faciliten la tarea.
Cabe decir en este punto, que existe un problema de adicción real a las tecnologías y que si no logras por ti mismo modificar tu dieta digital, debes consultar con un profesional de la salud para que te ayude en este proceso.
A continuación te propongo que realices algunas acciones para mejorar tu rendimiento y concentración.
- Desactivar notificaciones y marcar horario deseado para la consulta de la aplicación de mensajería instantánea o correo electrónico.
- Poner el teléfono en modo avión durante el período deseado de concentración máxima. Ponerlo en silencio también puede ser una opción, pero siempre corremos el riesgo de estar consultando o mirando si nos llaman.
- Instalar complementos para el navegador que te limitan el tiempo para resolver tareas específicas como Tomato Timer o Focus To Do. Este tipo de complementos están inspirados en la técnica del Pomodoro, y permiten planificar tareas y controlar su ejecución mediante un contador que recuerda cuánto tiempo queda para completarlas cada vez que abres una nueva pestaña. También hay otras herramientas sencillas de usar y sin instalación, como Tomato Timer o Pomo Focus.
- Disponer de un sistema de seguimiento del tiempo que pasamos en el móvil. Existen aplicaciones que nos ayudan a controlar el uso que hacemos de las APPS y que nos permiten saber en qué aplicación pasamos más tiempo, para así tomar consciencia y rectificar nuestra conducta. Yo concretamente uso StayFree (para Android), aunque existen muchas más. Apple tiene sus propias herramientas de control de uso y aplicaciones propias para iOS. Una vez sabemos en qué aplicación queremos reducir nuestra dedicación podemos programarnos alertas y limitadores de uso con estas mismas herramientas, que nos avisan de que hemos superado el tiempo que hemos marcado.
- No llevarte ni consultar el teléfono móvil cuando vas a dormir, al baño o mientras comes. Cada cosa tiene su tiempo y es importante dedicar tiempo de calidad y conciencia plena en aquellas actividades propias de la naturaleza humana. Además es bien sabido que la exposición a estímulos visuales antes de ir a dormir no ayuda a conciliar el sueño.
¿Y tú, también quieres mejorar tu rendimiento y salud controlando tu dieta digital?
Es posible, y no es tan difícil. Basta con querer, y sobre todo, con establecer una dinámica de trabajo diferente. Atrévete a dar el primer paso y verás los excelentes resultados que te puede aportar.
Desde GAEAPEOPLE llevamos años ayudando a personas y equipos a llevar a cabo procesos de Transformación Digital (y cultural) de forma estratégica para sus negocios, pero también consciente y saludable para las personas. Mediante la realización de un programa formativo transversal en transformación e innovación digital, herramientas y competencias de comunicación, marketing y ventas 360º, y estableciendo nuevos espacios para la reflexión conjunta, la innovación y el aprendizaje colectivo.
Las nuevas herramientas y estrategias digitales de comunicación, gestión de la información, marketing y ventas deben ser nuestras aliadas hacia el éxito, y debemos estar dispuestos a implicar a todo el equipo a asumir el reto de la transformación digital y la nueva realidad del teletrabajo de forma ordenada, consciente y beneficiosa en todos los aspectos de la vida y de la empresa.
El poder de adaptación al cambio de las personas y los equipos, apoyados por una formación online transversal y personalizada son los ingredientes básicos que permiten avanzar con éxito en la transformación digital.
deja tu comentario
TAGS eHealthGaealearningHerramientas digitalesMindset digitalSaludTrabajoTransformación digital
Deja una respuesta